Un juez federal en Seattle calificó como “descaradamente inconstitucional” el decreto del expresidente Donald Trump que pretendía poner fin al derecho de ciudadanía por nacimiento y emitió una orden temporal para frenar su implementación.
El juez John Coughenour, designado por el expresidente Ronald Reagan, concedió una medida de emergencia a petición del fiscal del estado de Washington, Nick Brown, y otros tres estados demócratas, quienes argumentaron que la medida violaba de manera evidente la Enmienda 14 de la Constitución. La orden bloquea la política durante 14 días mientras continúan los procedimientos legales.
“Una decisión sin fundamento constitucional”
Coughenour expresó su asombro por la decisión de firmar el decreto, cuestionando la preparación legal detrás de la medida. “En mis más de cuatro décadas en este tribunal, nunca he visto un caso donde la cuestión legal fuera tan clara”, afirmó.
Por su parte, Trump reaccionó al fallo en la Oficina Oval, indicando que su administración planea apelar la decisión. “Sabíamos que lo llevarían ante un juez específico en Seattle, y no nos sorprende este resultado”, declaró.
Impacto en los estados y la ciudadanía
Los estados demandantes advirtieron que el decreto no solo causaría incertidumbre para los bebés nacidos durante este período, sino que también representaría una carga financiera y logística significativa para los programas estatales. Lane Polozola, abogado del estado de Washington, destacó que “los nacimientos no se pueden pausar”, y señaló los graves efectos a largo plazo que la falta de ciudadanía podría tener sobre los niños afectados.
El Gobierno de Trump argumentó que la cláusula “sujeta a su jurisdicción” de la Enmienda 14 permite excluir a los hijos de inmigrantes indocumentados y de personas sin estatus legal permanente. Sin embargo, los estados denunciaron que el decreto fue diseñado intencionalmente para causar daño.
El fallo deja en suspenso la implementación de la medida, mientras los tribunales siguen evaluando su legalidad.