El Senador de Nuevo León, Jesús Horacio González se dijo preocupado por el avance de la llamada “ley apagón” en la Cámara de Diputados porque -señaló- es incompatible con los compromisos internacionales de México y atenta contra los principios de libre concurrencia y libre competencia.
“La propuesta de reforma a la Ley de la Industria Eléctrica es violatoria de instrumentos internacionales como el Tratado Integral y Progresista de Asociación Transpacífico (TIPAT) y el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), así como el Tratado de Libre Comercio entre la Unión Europea y México”, advirtió.
Apuntó que él está de acuerdo en que la CFE es una institución fundamental para el desarrollo del país y que se requiere que una empresa sana, fuerte y eficiente, ya que atiende a 43 millones de usuarios para la generación, transmisión, distribución, comercialización de electricidad.
“La industria eléctrica en México necesita tarifas competitivas y la generación privada precisamente ha contribuido a disminuir costos de generación. Mientras la CFE tiene costos de 1.23 a los 2.05 pesos por kilovatio-hora, los productores particulares tienen costos de 0.82 pesos”, explicó.
En concordancia con la iniciativa de ley que él presentó, González Delgadillo insistió en que México necesitamos reducir los costos de electricidad para fomentar la economía para el bienestar, ser más competitivos y atraer inversiones.
“La capacidad de generar energía limpia y renovable ha probado tener un costo de generación muy por debajo comparado con otras tecnologías, lamentablemente en México la capacidad instalada opera con los combustibles más caros y contaminantes, como el carbón, combustóleo y diésel”, reprobó.
Anunció que desde el Senado de la República el Grupo Parlamentario del PAN hará todo lo posible para evitar la ley apagón ya que eliminar la obligatoriedad de comprar por subastas para el Suministrador de Servicios Básicos y cancela permisos a actores privados.
“Con la reforma a la ley de la industria eléctrica cambia el orden de despacho, esto es, se le da prioridad a las fuentes de energía caras y contaminantes, y altera las condiciones de acceso al mercado mexicano de los inversionistas a las actividades de generación y comercialización… no lo podemos permitir”, concluyó.Zona de los archivos adjuntos