Grecia está afectada por “la peor ola de calor desde 1987”, afirmó este lunes el primer ministro Kyriakos Mitsotakis, en una jornada en la que la temperatura debería alcanzar los 45 grados centígrados en algunas regiones.
El país enfrenta desde el jueves una ola de calor cuyo pico se espera para este lunes y martes, según el pronóstico meteorológico. La canícula de julio de 1987, que afectó sobre todo a Atenas, dejó más de mil muertos.
Los bomberos griegos continuaban luchando contra dos importantes incendios en la isla de Rodas y en el noroeste del Peloponeso.
Más de 3 mil hectáreas de pinares y olivares ardieron en Acaya, cerca de Patras, en la península del Peloponeso, a 200 km de Atenas, según las estimaciones del Observatorio Nacional de la capital griega, que se basa en imágenes del satélite medioambiental europeo Sentinel-2.
Esta superficie podría aumentar aún porque el incendio, que se desencadenó el sábado, no estaba controlado por completo el lunes por la mañana, indicaron los servicios meteorológicos griegos ANA.
La canícula que afecta a Grecia vuelve aún más difícil el trabajo de las autoridades en esta región, donde la vegetación está seca por el calor. Este lunes se esperan temperaturas de 44 a 45 ºC en el oeste del Peloponeso, según los servicios meteorológicos.
En Rodas, las autoridades son más optimistas, y estiman que el incendio que se declaró el domingo en el centro de isla estaba apagándose este lunes, gracias a refuerzos importantes de efectivos y medios para luchar contra el fuego enviados por la noche
Cuatro aviones hidrantes comenzaron a sobrevolar el lunes muy temprano por la mañana la región de Pandanassa donde fue declaró el incendio, según la protección civil.
“El amanecer encuentra a Rodas mejor que la víspera. Los frentes (del incendio) retroceden” y están “casi bajo control”, declaró el gobernador del sur del mar Egeo, George Chatzimarkos, en un comunicado publicado este lunes.
“El primer objetivo, la protección de la vida humana, se alcanzó” y “los daño en la red eléctrica fueron reparados”, dijo Chatzimarkos, según ANA.
Más de un centenar de bomberos, ayudados por 20 vehículos, tres aviones y seis helicópteros, fueron movilizados este lunes en Rodas, indicó la protección civil.
Las fuerzas terrestres serían reforzadas en las próximas horas con unos cincuenta bomberos adicionales y 14 vehículos que llegarían en barco desde el Pireo, el puerto de Atenas, según la misma fuente.
El pico de la ola de calor que sufre Grecia se espera para este lunes y martes, con temperaturas de 40 a 42 ºC en las islas, y 41 a 43 ºC en el continente, con máximas de 44 a 45 ºC en el Peloponeso y Tesalia (norte).
Hace unos días, un incendio devastó el Monte Penteli, cerca de la capital griega.
En julio de 2018, 102 personas murieron en la ciudad costera de Mati, en los alrededores de Atenas, el peor saldo provocado por un incendio en el país.