Daniel Zellhuber hizo historia al convertirse en el primer peleador mexicano en conseguir un contrato del Ultimate Fighting Championship (UFC) en el Dana White Contender Series (DWCS).
El prospecto mexicano en la División de Peso Ligero derrotó por decisión unánime con tarjetas por 29-28, 29-28, 29-28 al brasileño Lucas Almeida (12-1), a quien le quitó el invicto en una batalla en las 155 libras.
Gracias a su actuación, el “Golden Boy” recibió uno de los dos contratos entregados.
“Me gustaría dejar un legado en el deporte tanto para México como para el mundo”, aseguró Zellhuber (12-0) en entrevista con RÉCORD en 2019.
Tras sufrir bullying en la primaria, Daniel se inició en las Artes Marciales Mixtas (MMA) sin imaginar que llegaría a la mejor Liga del mundo.
“Llegué de 12 años con mí entrenador y lo que menos pensaba que iba a hacer era que iba a pelear de manera profesional. Después empecé a entrar que a un torneo amateur, luego otro y otro y un día dije ‘bueno, por qué no debutamos’ y de ahí no he parado. Han sido pelea tras pelea y la idea es mantener el invicto”, platicó Zellhuber.
“De niño era muy introvertido, no era alguien muy expresivo, era un niño callado y a la vez este deporte me ha dado eso. Conocer tantas personas te vuelve más seguro de ti mismo, simplemente experimentar el estar en una jaula es algo que la mayoría de la gente no hace, entonces todas esas experiencias me han hecho evolucionar no sólo como atleta sino como persona. Las Artes Marciales Mixtas no cambiaron mi vida, hicieron mi vida”, aseguró.
La joven promesa mexicana de MMA se fue a entrenar a Brasil en 2019 donde tuvo los consejos de Eric Albarracin, coach de Henry Cejudo y Paulo Costa. Ahí pulió su performance y mejoró la lucha olímpica, que era una de sus debilidades.