En el patio central de Palacio Nacional, para la conmemoración oficial del Día Internacional de la Mujer, el presidente Andrés Manuel López Obrador fue reconocido en su política de género, por decenas de funcionarias de su gobierno, integrantes del Poder Judicial, diputadas y senadoras, la jefa de gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum y la gobernadora del Banco de México, Victoria Rodríguez Ceja, quienes le aplaudieron y reconocieron como el líder del movimiento de transformación. Llamó la atención la ausencia de Beatriz Gutiérrez Muller, esposa del mandatario, quien se encuentra en Argentina.
En el costado este del patio del inmueble histórico, junto a la fuente del Pegaso, se montó un templete y más de cien sillas. Aparecieron ahí Claudia Sheinbaum, Loretta Ortíz. Victoria Rodríguez, y al frente entre otras funcionarias, Rosa Icela Rodríguez. Mientras en el entorno de Palacio Nacional mujeres de la policía capitalina y de la Secretaría de Marina tomaban sus posiciones de vigilancia y resguardo, horas antes de que inicie el arribo de contingentes de mujeres que participaran en la manifestación popular del Día Internacional la Mujer.
El mandatario, emitió un mensaje que fue aplaudido por sus invitadas. Reconoció el trabajo de la secretaria de Seguridad Pública y Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez, que ha conseguido reducir la violencia “y podamos garantizar la paz sin masacres, sin violación de los derechos humanos, eso es un orgullo. Nosotros siempre vamos a estar de la luz del partido de las libertades y de la fraternidad y vamos a seguir trabajando juntos, para que las cosas mejoren, sigan mejorando, soy optimista, vamos avanzando en el proceso, con la revolución de las conciencias, todo está cambiando mucho, mucho, mucho, mucho.
“Como nunca en nuestro pueblo, el pueblo cambia. No va ha haber retrocesos, no se va retrogradar en México, siempre vamos a ir avanzando.”
Así el tabasqueño adujo que “no se podría hablar de la libertad, de la igualdad género o de la igualdad ante la ley, ante Dios, si no tenemos presente la igualdad económica y social como algo fundamental, como algo central. Antes en la ciencia social eso era lo básico, la lucha por la igualdad, y se fueron creando nuevos derechos y esto fue enriqueciendo el proceso para buscar. Pero no debemos de olvidar que es fundamental, básico luchar por la igualdad económica y social, luchar en contra de la opresión, luchar en contra de exportación, en contra del racismo, del clasicismo, de la discriminación.”
El mensaje presidencial redundo en que no haya la monstruosa desigualdad económica social que “existe desgraciadamente en nuestro país, y en el mundo. Desde hace muchos años los dirigentes sociales, políticos más importantes del país, se han propuesto una sociedad justa, recordemos Los Sentimientos de la Nación de (José María Morelos), tenemos que seguir enarbolando como principal bandera la lucha por la justicia.”
Y recomendó, “no quedarnos solo en el discurso o quedarnos en la retórica, en los nuevos términos, las nuevas palabras nuevos conceptos, las modas, sino transformar la realidad, buscando que no haya tanta desigualdad en nuestro país. Por eso cerebro qué en todos los programas de bienestar está incluyendo a mujeres por qué, lo cierto es que somos hombres y mujeres, siempre y en el propósito de alcanzar una sociedad más justa, pues vamos abajo, a trabajar con los más pobres, por la gente más necesitada, y ahí se atiende hombres y mujeres.”
Así desglosó que en el programa jóvenes trabajando por el futuro, el 58 por ciento son mujeres; en la pensión para adultos mayores, 55.9, son mujeres las que se benefician; en las becas para niñas y niños hijos de trabajadoras, 50.8 son mujeres; en las becas en general del sistema Benito Juárez 68.8 por ciento de los beneficiarios son mujeres. En educación media superior 51.8 por ciento, son mujeres; en tandas para el bienestar, 70 por ciento son mujeres.
“Esto es un proceso relativamente nuevo –el apoyo a las mujeres- de cuando menos 20 años a la fecha, y hemos contribuido en ese proceso de maneras, y por eso podemos decir que como México no hay dos América, en cuanto participación de las mujeres en las decisiones públicas no hay otro país en toda América con tantas mujeres en la administración, en puestos de representación política, en ningún país de América. Nuestro país es de los más avanzados en el mundo de las mujeres, y eso lo hemos logrado en los últimos tiempos.”
Esa aseveración le valió una andanada de aplausos, y repuso, “por eso tenemos que seguir adelante luchando por la igualdad económica y social, luchando por los derechos de la mujer, por la igualdad de género manteniéndonos dos principios, nuestros ideales de no mentir, no robar, no traicionar a nuestro pueblo, ideales que tienen que ver desde luego con no permitir la impunidad, el que podamos garantizar la paz, la tranquilidad estamos haciendo todos los días desde muy temprano.”
Al concluir el evento, y antes de que López Obrador se retirará, creció el coro entre las féminas, ¡foto,foto,foto!, y la mayoría se dirigió al templete. El presidente accedió y posó en una placa de grupo. Después algunas de sus invitadas se le acercaron y tomaron selfies junto a su líder. Le abrazaban, le plantaban besos en las mejillas y él sonreía complaciente.