La Fiscalía General de la República (FGR) concluyó que la caída de un helicóptero de la Secretaría de Marina (Semar), el 15 de julio pasado, tras la captura del narcotraficante Rafael Caro Quintero, no fue por un ataque externo, sino por falta de combustible.
En un comunicado, la dependencia federal aseguró que, con motivo de la caída de la nave, en inmediaciones del aeropuerto de Los Mochis, Sinaloa, que provocó la muerte de 14 elementos navales, se inició la carpeta de investigación correspondiente.
Señaló que en el expediente se cuenta ya con el dictamen en materia de incendios de explosión, “que indica que no hubo ningún ataque de carácter externo, ni ninguna explosión por algún artefacto ajeno a la aeronave”.
Agregó que, por lo que toca a la caja negra, “la empresa fabricante, después de haberla recibido y analizado, ha señalado que fue la falta de combustible la causa de la caída”, agregó la dependencia que encabeza Alejandro Gertz.
La nave siniestrada era un helicóptero Black Hawk en la que viajaban 14 elementos de las Fuerzas Especiales de la Marina-Armada de México que participaron en la detención de Rafael Caro Quintero