El presidente Andrés Manuel López Obrador sostuvo que no tiene “nada que temer” sobre el hackeo de correos electrónicos de la Secretaría de la Defensa Nacional, pues todo lo que ha salido ya se conoce “hasta faltó”. Subrayó que no se va a encontrar ninguna comunicación ordenando “fabricar delitos, o reprimir, o torturar. No, eso sería gravísimo, pero nunca jamás. Eso sería traicionarnos a nosotros mismos. No somos iguales”.
En su conferencia, aseguró tener un escudo protector: “es el ángel de la guarda que es el pueblo y mi autoridad moral, para quienes quieren dedicarse al noble espíritu de la política, actuar con rectitud, no ocultar nada para tener protección y la honestidad es lo que estimo más importante en mi vida”.
Hablo también de la reforma constitucional para prorrogar la presencia de las fuerzas armadas en tareas de seguridad, rechazando que existan presiones del crimen organizado para que ya no se involucren, pues se trata de un asunto de “politiquería” por parte de legisladores y partidos de oposición.
Consideró que se han equivocado en su posicionamiento al respecto que contrasta, dijo, con las posturas de los gobernadores. Señaló que, durante la toma de posesión de la nueva gobernadora de Aguascalientes, María Teresa Jiménez, ella solicitó a la secretaría de Seguridad Pública, Rosa Icela Rodríguez, quien asistió al relevo en su representación, la presencia de la Guardia Nacional y el ejército en tareas de seguridad.
“Nos está pidiendo esto, pero los líderes de su partido están en contra de lo que nos está solicitando. Es un asunto ni siquiera puedo decir político, sino politiquero (…) Imagínense sin el apoyo del ejército, la marina y la Guardia Nacional no se consolida, entonces si tendríamos problemas”.
A menos que busquen el aumento de los homicidios y la violencia para que el gobierno federal quede mal, por eso, tienen que hacerse cargo.