América falló en la cancha, no consiguió derrotar al Toluca para meterse a una nueva Final, los Diablos Rojos salieron con vida al igualar 1-1 en un territorio que fue hostil para ellos desde el comienzo.
La atmósfera era inmejorable, el americanismo convirtió el Azteca en una locura, una olla de presión que explotaría a con la primera que tuviera su equipo.
Sin embargo, los Diablos supieron sobrellevar la intensidad azulcrema que los agobiaba desde todos los puntos y en jugada a balón parado encontró inmerecidamente un gol de Torres Nilo que los dejó respirar dejando en silencio al Coloso.
Las Águilas sabían que era clave no irse al descanso con la desventaja y se mantuvo firme tocando la puerta rival, misma que logró derribar con un cabezazo de Alejandro Zendejas, que se coló a segundo poste sin marca para regresarle el aliento al Azteca.
La situación estaba como al inicio, con la exigencia de meter un gol, pero los mexiquenses se plantaron bien en su cancha complicando las cosas para los locales que empezaron a ser presas de la desesperación.
Y entonces apareció el goleador del equipo, Henry Martín, quien en tiempo de compensación sacudió las redes con un cañonazo para hacer explotar de alegría al americanismo que pensó estaba consolidada la remontada, pero el arbitraje frustró el sueño anulando el tanto por fuera de lugar.
