El crecimiento de la migración irregular no es un problema sólo de México y Estados Unidos, por lo que el resto de los países de la región deben solidarizarse para encontrar una solución de fondo, señaló ayer la titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Alicia Bárcena.
La canciller encabezó una delegación del gabinete del presidente Andrés Manuel López Obrador, que se reunió en Washington con funcionarios del gobierno de Joe Biden para analizar nuevas medidas de atención a la ola migratoria en la frontera común.
Bárcena destacó que ambos gobiernos dialogan sobre cómo trabajamos conjuntamente para abordar este tema en beneficio de la gente, pero también de manera que los demás países de la región se solidaricen con México y Estados Unidos, porque no es un problema sólo de nosotros.
México destacó también el gran esfuerzo que hemos iniciado para atender las causas profundas de la migración. En particular, el programa de desarrollo en el que invertirán 180 millones de dólares para apoyar a Guatemala, Honduras, El Salvador, Colombia, Ecuador, Venezuela, Cuba y Haití.
El secretario de Estado, Antony Blinken, expuso en su discurso inicial que hay grandes progresos en la materia, como resultado de la última reunión bilateral realizada el pasado 27 de diciembre en Palacio Nacional, la cual fue encabezada por el mandatario mexicano.
“Creo que hemos tenido grandes progresos en sólo tres semanas. Ahora analizaremos qué pasos adicionales podemos adoptar para alcanzar la meta que compartimos de reducir los flujos de migración irregular sin precedente”, destacó.
Bárcena dijo a sus contrapartes estadunidenses que el mensaje del presidente López Obrador para el gobierno de Biden es que tenemos la intención de ayudar, apoyar en esta tarea y gran batalla que estamos viviendo todos, que es la alta movilidad humana. No es un problema sólo de nuestra región, el mundo entero está atravesando una crisis.
Integraron la delegación nacional Bárcena y los secretarios de Seguridad y Protección Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez; de la Defensa Nacional, Luis Cresencio Sandoval, y de Marina, Rafael Ojeda, entre otros funcionarios.
Por la parte estadunidense acudieron Blinken; el secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, y la asesora de Seguridad Nacional, Elizabeth Sherwood Randall.