En enero, la inflación general anual sorprendió al alza y aceleró a 4.88 por ciento, su mayor nivel desde junio de 2023, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
El repunte en la inflación fue consecuencia de mayores precios en frutas y verduras, los cuales crecieron 21.78 por ciento en comparación con el mismo periodo del año pasado.
En particular, destacó el caso del jitomate y la cebolla, con alzas de entre 21 y 52 por ciento, así como la calabacita y alimentos preparados en restaurantes, taquerías, loncherías, torterías y fondas.
Según el Inegi, otros rubros impactados durante el arranque de año fueron los gastos relacionados a la educación y vivienda, cigarrillos, refrescos, al igual que derechos por el suministro de agua.
El alza de precios durante el primer mes del año fue más visible en entidades como Guerrero, Tlaxcala, Chiapas, Puebla y Oaxaca.
Tras estos resultados, la inflación general en el país quedó por arriba de los estimados en la Encuesta Citibanamex de Expectativas, que esperaban un nivel de 4.85 por ciento.
“Con la inflación al alza, se espera que el Banco de México muestre un poco más de cautela para iniciar los recortes en la tasa de interés”, comentó Gabriela Siller, directora de análisis económico y financiero de Banco BASE.
Desde finales del año pasado, el banco central encabezado por Victoria Rodríguez Ceja alertó que el panorama para la inflación en los próximos meses aún era incierto y con varios riesgos al alza.
Así, se prevé que la inflación regrese al rango meta de entre dos y cuatro por ciento por lo menos hasta 2025.