17 de Abril de 2024
El Senado aprobó en lo general a diversas reformas a la Ley de Amparo, con la cual, entre otros aspectos, se impide al Poder Judicial que otorgue amparos en contra de obras y decisiones del Ejecutivo federal.
Con 69 votos a favor de Morena, PT y Partido Verde y, 42 votos en contra de la oposición que integra el PAN, PRI, PRD y senadores sin partido, se avaló la reforma a los artículos 129 y 148 de la Ley de Amparo, así como a la Ley Reglamentaria de los artículos 103 y 107 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, en materia de suspensión del acto reclamado.
Al presentar el dictamen, la senadora Olga Sánchez Cordero aseguró que con esta enmienda “no estamos afectando derechos, ni por supuesto que estamos haciendo una regresión en las garantías y en la promoción de derechos y, desde luego, tampoco violentamos el principio de constitucionalidad del artículo 1″.
“Estamos de acuerdo con el principio de la relatividad de las sentencias de amparo y del principio de constitucionalidad de las leyes”, justificó la senadora Sánchez Cordero al afirmar que con un amparo se podía suspender con efectos generales hasta diez años.
Durante el debate, la oposición sostuvo que dicha ley vulnera los derechos humanos de los ciudadanos, al impedirles que recurran a la promoción de un amparo para protegerse de eventuales arbitrariedades.
Con la reforma se pretende evitar abusos de la dictadura de la toga que genera discrecionalidad en sus asuntos.