Argentina tiene a Messi. Con esa oración se puede resumir el partido entre México y Argentina. Un duelo demasiado trabado, sin espacios, sin ocasiones realmente, donde se corrió y se metió porque la derrota era mortal para la albiceleste y dejaba en terapia intensiva a los aztecas.
Y apareció Leo, a la hora de juego, en una de las pocas que tuvo espacio, se perfiló y la metió pegada al poste. Y sobre la hora, puso el pase para que Enzo Fernández la metiera pegado al palo. 2-0 lo ganó Argentina y México tiene que usar la calculadora para avanzar a la segunda ronda.