El municipio de San Pedro Garza García mantiene su compromiso de cero tolerancia ante conductas indebidas de sus elementos policiacos, como parte de un esfuerzo continuo para blindar la seguridad y evitar infiltraciones del crimen organizado.
El alcalde Mauricio Fernández y el secretario de Seguridad Pública, José Luis David Kuri, anunciaron la baja de 35 policías en lo que va de la administración, incluyendo a dos elementos foráneos que fueron puestos a disposición de la Fiscalía General de Justicia del Estado tras un incidente violento ocurrido el lunes en el cuadrante que tenían asignado.
“El blindaje de San Pedro es un trabajo continuo, y vamos a seguir depurando y limpiando la Policía. Queremos policías extraordinarios y confiables. Los que no entiendan este compromiso, no tienen lugar aquí”, declaró el alcalde Fernández, reafirmando la necesidad de mantener altos estándares de seguridad.
El secretario Kuri detalló que los policías dados de baja estaban vinculados a casos de corrupción o posibles nexos con grupos delictivos. Asimismo, subrayó que cerca del 70-80% del cuerpo policiaco ha aprobado pruebas de confianza y que el objetivo es alcanzar una certificación completa.
Como medida adicional, se modificaron las políticas de reclutamiento para admitir únicamente a personas originarias de Nuevo León, buscando fortalecer el compromiso con el municipio y el estado. Además, las pruebas de confianza serán requisito obligatorio antes de iniciar el proceso de formación policial.
“Cero tolerancia significa exactamente eso: no se permitirá que nadie, interno o externo, realice actos indebidos en San Pedro”, concluyó Kuri.
