El gobierno de Rusia está dando pasos acelerados para regular las industrias de bitcoin y las criptomonedas, donde dos órganos gubernamentales de ese país tienen opiniones diferentes, como la línea dura que maneja el banco central ruso.
El Ministerio de Hacienda ruso presentó varias propuestas para regular las criptomonedas y ve un futuro en el que los usuarios faciliten las transacciones a través de los bancos. Esto se produce solo unos días después de que el Banco Central de Rusia solicitara una prohibición de esta industria.
El Ministerio de Finanzas de Rusia se opone a la prohibición. “La regulación es suficiente para proteger a nuestros ciudadanos”, dijo Ivan Chebeskov, jefe del departamento de política financiera del ministerio, en una conferencia sobre criptomonedas el pasado martes, informó la agencia rusa Tass.
Agregó que el ministerio ha preparado un conjunto de regulaciones criptográficas propuestas en espera de la evaluación y aprobación del gobierno. El Banco Central de Rusia propuso una prohibición total de las criptomonedas en un informe publicado a principios de enero.
Según Tass, el presidente ruso, Vladimir Putin, respalda los esfuerzos del gobierno para regular las criptomonedas, a pesar de los comentarios del Banco ruso la semana pasada sobre los supuestos riesgos de permitir que el bitcoin prolifere en el país.
En una reunión el pasado miércoles con funcionarios del gobierno, Putin afirmó que Rusia tiene “algunas ventajas competitivas” para la minería de bitcoin, a saber, un excedente de energía y una fuerza laboral bien capacitada, luego de afirmar que el banco central no se interpondría en el camino de la innovación tecnológica.
El Ministerio de Hacienda no está solo en sus críticas. Muchos dentro de las esferas tecnológica y política han expresado sus preocupaciones. “Ningún país desarrollado prohíbe las criptomonedas”, escribió el fundador de Telegram, Pavel Durov, en un tuit.
“Estas tecnologías mejoran la eficacia y la seguridad de muchas actividades humanas, desde las finanzas hasta las artes”, explicó Durov.
El ministerio enumeró varios beneficios de tales regulaciones, incluida la posibilidad de generar impuestos y una mejor capacidad para rastrear actividades delictivas.
Ciudadanos rusos se encuentran en la misma línea que el Ministerio de Hacienda. Una encuesta de personas entre las edades de 18 a 44 años realizada en Rusia, muestra que el 32 por ciento de los ciudadanos se oponen a la llamada criptoprohibición.
