En la sesión solemne por el cierre de los trabajos de las LXII y LXIII legislaturas, la presidenta de la Junta de Coordinación Política, Ana Lilia Herrera Anzaldo, manifestó que México ya no es terreno fértil para el fundamentalismo, el paternalismo o el mesianismo.
Desde la tribuna, advirtió que falta a la verdad “aquel que pretenda poner en entredicho, o echar para atrás los avances que hemos conseguido por la vía del consenso en la pluralidad”.
Señaló que en estos seis años se demostró que el país puede transformarse por la vía institucional “miente quien afirma que puede cambiar el destino de México a voluntad”; pretender regresar al pasado es una idea irresponsable, atajó.
Dijo que sí se debe exigir la justicia por la que hoy clama una sociedad agraviada y erradicar los privilegios indebidos de la clase política, pero garantizando la certidumbre y tranquilidad al trabajo honrado de las familias mexicanas.
Los retos que tenemos no podrán ser resueltos si no es a través de las leyes y las instituciones, apuntó la legisladora del Grupo Parlamentario del PRI.
Consideró que en medio de un agitado proceso electoral, ni la ocurrencia ni el discurso del odio, deben mirar con nostalgia al pasado.
Opinó que es momento de impulsar una profunda reforma social que eficiente presupuestos, “que cierre el paso, no solamente a la corrupción, sino a las ocurrencias y al populismo”.
En este sentido, dijo que se avanzó en la construcción de un andamiaje legal cuya implementación está en marcha en el ámbito federal, “aunque debemos advertir que las soluciones de fondo que requerimos, no se dan por decreto, sino que exigen también la participación de los tres poderes y de los gobiernos estatales y municipales”.
En la Junta de Coordinación Política –agregó– los desacuerdos se discutieron con civilidad y respeto hasta alcanzar consensos e hizo un reconocimiento a cada uno de sus compañeros y compañeras que durante este periodo integraron este órgano de gobierno.
Herrera Anzaldo destacó que en la Junta se logró pactar y desarrollar una agenda de gran trascendencia para la consolidación de una sociedad de derechos y libertades, basada en el crecimiento económico, fortalecimiento al empleo, la competitividad, transparencia, rendición de cuentas, combate a la corrupción y en materia de seguridad, justicia, derechos humanos, equidad de género, entre otros.
Gracias a ello, hoy se tienen controles más estrictos para evitar el endeudamiento irresponsable de los estados y municipios, un régimen institucional más fuerte, que permite la participación de candidatos ciudadanos en los procesos electorales y la formación de gobiernos de coalición, así como un marco constitucional más robusto en materia de transparencia.
“Hoy vivimos en un México donde los partidos políticos y sindicatos son sujetos obligados a transparentar y permitir el acceso a su información, y nos pronunciamos por eliminar los candados que impedían perseguir a los servidores públicos que cometen delitos, añadió.
“La democracia no supone unanimidad, pero exige siempre anteponer el interés superior de la nación. la productividad de estas dos legislaturas, habla de nuestra capacidad de alcanzar acuerdos”, expresó.
Los coordinadores de los grupos parlamentarios del PRI, Emilio Gamboa Patrón; del PAN, Fernando Herrera Ávila; del PT Manuel Bartlett Díaz; del PRD, Luis Sánchez Jiménez, y del PVEM, Carlos Alberto Puente Salas, manifestaron sus posturas respecto al trabajo realizado en las dos legislaturas.
Estuvieron en la sesión solemne como invitados Alfonso Navarrete Prida, secretario de Gobernación, y el magistrado de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Constancio Carrasco Daza, así como los subsecretarios Felipe Solís Acero y Manuel Cadena Morales.
También los senadores con licencia Arely Gómez González, Eviel Pérez Magaña, David Penchyna Grub, Omar Fayad Meneses, Roberto Gil Zuarth, Pablo Escudero Morales, Arturo Zamora, Rabindranath Salazar, Sonia Mendoza y María Elena Barrera Tapia.