Eduardo Gaona, Coordinador del Grupo Legislativo de Movimiento Ciudadano (GLMC), presentó una iniciativa para modificar el Código Civil del Estado para evitar el cobro abusivo por parte de los arrendatarios al momento de poner en renta casas y departamentos.
Gaona expuso que desde el inicio de la pandemia por Covid-19, las finanzas familiares se vieron afectadas por la pérdida de trabajos, y con la disminución de sus ingresos, creció la tendencia de que las personas prefieren rentar una casa o departamento, en vez de realizar la misma compra del inmueble.
Para evitar cobros abusivos, con la iniciativa se propone que las rentas únicamente podrán aumentar de manera anual, sin exceder el 10 por ciento de la cantidad pactada como renta mensual.
Según cifras oficiales, la demanda de viviendas a través de la renta en Nuevo León creció en un 57 por ciento, mientras que la compra de inmuebles fue del 43 por ciento.
Y el crecimiento poblacional se prevé que llegue a más de 6 millones de ciudadanos en la entidad para el año 2030.
Con estas cifras, se pone en evidencia la necesidad de actualizar el marco jurídico respecto a la forma en que se estipulan los contratos de arrendamiento de bienes inmuebles destinados para habitación.
“Se debe priorizar el acceso a viviendas adecuadas como parte de un derecho humano antes de considerarse como mercancía”, dijo el Coordinador de la Bancada Naranja.
“En cuanto a los contratos de arrendamiento de las fincas urbanas como lo establece el Código Civil del Estado, se encuentra obsoleto, en el sentido que establece montos que no corresponden a la realidad actual del precio de las rentas”.
Asimismo, se busca que el arrendador no podrá exigir más de una mensualidad de renta a manera de depósito. Además, para el caso de fincas urbanas destinadas para habitación, los contratos de arrendamiento serán de seis meses o de un año forzoso.
