El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que la verdadera lucha con los jefes de los grupos delictivos “es ofrecer opciones a los jóvenes para que no se los lleven y no formen parte de un ejército de reserva de la delincuencia”, y eso sólo se logra al atenderlos y con el combate a la pobreza.
Mencionó que ahora en Ciudad Juárez los muchachos son contratados como aprendices y reciben el equivalente a un salario mínimo, de 213 pesos, “para que no sean enganchados por la delincuencia”.
Durante la inauguración del cuartel de la Guardia Nacional en este municipio fronterizo, el mandatario llamó a la unidad a los gobiernos estatales para enfrentar a la delincuencia y sostuvo que el apoyo de las fuerzas armadas “es un gran respaldo” a su gobierno. “Por eso hablo de dos instituciones fundamentales del Estado, son las que más me están apoyando para llevar a cabo, entre todos y desde abajo, la transformación de México”.
En su presentación hizo una amplia referencia a los programas sociales que se han aplicado en Ciudad Juárez y, tanto en su discurso como en un video que más tarde subió a sus redes sociales, detalló que se trata de “hechos y no palabras”.
En él resalta que en su gobierno ya no hay gasolinazos. “Me da mucho gusto poder decir que hemos cumplido con el compromiso de no aumentar el precio de las gasolinas, del diésel, de la luz”.
El Presidente se detuvo en una estación para mostrar que en esta ciudad el litro de Magna está en 15.20 pesos. “Aquí y en toda la frontera la gasolina es más barata porque hice el compromiso de reducir los precios de los combustibles. También, en toda la línea divisoria, se paga menos de impuestos. El IVA es de 8 por ciento, el ISR se redujo a 20 por ciento y aumentamos el salario mínimo casi al doble, es de 213 pesos, y en el resto del país, aunque ha subido casi 50 por ciento en este gobierno, es de 141 pesos”.
Asimismo, planteó a los mandatarios estatales que puede haber diferencias, pero se requiere unidad para garantizar la paz y la tranquilidad del país.
López Obrador sostuvo que para avanzar en materia de seguridad se deben atender varios temas: primero, que la gente viva mejor, que haya bienestar, “no sólo material y del alma”, y subrayó que si los jóvenes tienen opciones se avanzará en serenar poco a poco a Ciudad Juárez, a Chihuahua y al país.
En cambio, “si se les da la espalda, si se abandona el pueblo, nunca se podrá garantizar la paz ni la tranquilidad. Es lo que hacían anteriormente. Las autoridades volteaban a ver para otro lado, a los jóvenes no los atendían, sólo los etiquetaron, les llamaron ninis. Los trataron de manera despectiva. Ahora es distinto”.
Antes, la secretaria de Seguridad, Rosa Icela Rodríguez, expresó que hacer la guerra en el pasado contra la delincuencia no funcionó y consideró que se requiere el apoyo de padres y abuelos para que a los jóvenes no les resulte atractivo el crimen organizado.
“Estamos seguros de que no desean ver a sus hijos o nietos relacionados con la comisión de ilícitos. Insístanles en seguir por el camino del bien, que rechacen la participación en actividades delictivas y las drogas”.