Ante el posible regreso a clases presenciales en educación básica y la necesidad de rehabilitar las escuelas públicas, autoridades estatales realizaron recorridos para el seguimiento al levantamiento de las condiciones y necesidades de los más de 6 mil planteles educativos de la entidad.
Esto tiene por objetivo el seguir trabajando juntos en la reactivación de las actividades que a causa de la pandemia fueron detenidas.
En esta segunda etapa que se realizó en forma simultánea, autoridades de Salud estatal, directivos, docentes, personal de las 13 oficinas regionales y del Instituto Constructor de Infraestructura Física Educativa y Deportiva de Nuevo León (ICIFED) constataron y focalizaron los daños colaterales tras el cierre de los planteles por la suspensión de clases presenciales y que previamente los directivos habían reportado a través de un censo en la primera etapa.
Durante el diálogo con personal de las escuelas, la Secretaría de Salud enfatizó principalmente la necesidad de asegurar que todos los planteles cuenten con los filtros de prevención a la entrada, además de agua y jabón en baños para garantizar el lavado frecuente de manos de la comunidad educativa.
Por su parte, la Secretaría de Educación informó que se contemplan comités de salud y seguridad en cada centro escolar, los cuales ya fueron integrados al 100 por ciento, y lo conforman el director de la escuela, padres de familia y un maestro.
