El Senador de la República Víctor Fuentes Solís expresó que “si bien no le vamos a cortar y a mochar las manos a él y a sus malos colaboradores, empezando por el secretario general de Gobierno, sí le vamos a mochar el sexenio”, en alusión al exhorto que le hizo al gobernador de Nuevo León para que renuncie con dignidad.
“Le vamos a mochar este turno fallido de gobernanza que llevó en el estado de Nuevo León y qué demostró que la figura independiente, pues, lamentablemente ‘se la llevó de encuentro’, al menos en el estado Nuevo León”, lamentó.
Explicó que la sentencia de la sala regional, especializada en delitos electorales, deja un espacio muy amplio al Congreso del estado, tan ambiguo, que en ninguna parte establece la remoción. “Simple y sencillamente establece un sentido de omisión por su parte, al haber permitido que estos cientos de funcionarios levantaran firmas en horarios hábiles, en horarios de trabajo…, en este sentido, el proceso se vuelve vulnerable”, dijo.
El legislador por Nuevo León expresó su plena confianza a los diputados locales que integran el Congreso de Nuevo León porque, apuntó, buscarán el mejor procedimiento para sancionar al gobernador, aunque advirtió que serán muchos recursos y procedimientos los que se tienen que agotar.
“Para empezar, el artículo 106 de la Constitución del estado de Nuevo León es muy tajante y muy claro cuando establece las causas por las cuales el gobernador puede ser removido y que son fundamentalmente dos: traición a la patria y la comisión de delitos graves”, señaló.
Además, señaló que apenas hace unos meses el Congreso de la Unión tipificó el delito de corrupción como un delito grave, pero en 2018 no era así. “Si el Congreso del estado determinara removerlo en definitiva, pues, obviamente, estaría atentando contra este artículo de la Constitución del estado de Nuevo León”.
Por esta razón jurídica, Fuentes Solís insistió en que, en un ejercicio de dignidad y de honor, Jaime Rodríguez Calderón, “El Bronco”, tenga a bien dejar el cargo, como lo hizo Eduardo Elizondo, Sócrates Rizo y Fernando Canales porque aceptaron públicamente que ya no existían las condiciones adecuadas para poder seguir ejerciendo su gobierno.
“Nuevo León es hoy un ejemplo de todo lo malo y dejó de ser un ejemplo de todo lo bueno. Por ello, es fundamental que el gobernador deje el cargo y se nombre un interino que dé un espacio adecuado, suficiente y vasto, para una transición”
Anunció que, en próximos días, el presidente nacional del PAN, Marko Cortés, se sumará en Nuevo León a esta causa y que, de todos modos, no es asunto de partidos, sino que se trata de una exigencia de la inmensa mayoría de los ciudadanos del estado.