El gobierno federal tiene garantizados los recursos para apuntalar el plan anti inflacionario durante todo 2022, aseguró el presidente Andrés Manuel López Obrador quien señaló que no van a incrementar los precios de gasolina, diésel y la energía eléctrica.
Durante su conferencia, el mandatario señaló que el sector conservador quisiera que se incrementaran el precio de los energéticos, pero no será el caso.
López Obrador comentó que, durante el encuentro con los integrantes del Consejo Mexicano de Negocios, este jueves, abordó la inversión privada, algunas preocupaciones para que aquellas empresas que importan gas lo efectúen en condiciones favorables y les mostró las cifras de diversas variables económicos en donde, a pesar de la coyuntura inflacionaria, comparativamente con el país se ha mantenido por debajo del promedio en el mundo.
Informó que en el encuentro ofreció gestionar una reunión con empresarios de México durante su visita a Washington para el encuentro en la Casa Blanca con el presidente Joe Biden. Tras señalar que éste podría realizarse después del 15 de julio (aunque aún no hay fecha definida).
Refirió que la inflación en México se redujo un poco porque llegó a estar en 7.80 por ciento y ahora está en 7.65, abajo de países como España Alemania, Colombia o Brasil.
En este contexto expuso la evolución de las diversas variables económicas durante su gobierno entre las que destacó el incremento de las reservas internacionales que actualmente está en 198 mil millones de dólares, aunque alcanzó 205 mil 559 millones de dólares. Mencionó que, a pesar de la caída reciente de la Bolsa Mexicana de Valores, en el sexenio se ha incrementado el índice en 15 por ciento.
Refirió también que en la actualidad hay 21 millones 25 mil 320 de trabajadores inscritos en el Instituto Mexicano del Seguro Social, si bien reconoció que la generación empleos en mayo y junio no correspondió con las expectativas que se tenían para este periodo.
Refirió que México sigue siendo uno de los países más atractivos para la inversión extranjera que alcanzó un récord con 19 mil 428 millones de dólares, en tanto que las remesas se han consolidado con 51 mil, 594 millones de dólares que han enviado los paisanos y que impidieron que la economía mexicana “no se nos desplomará la economía, y la gente no dejará de tener lo básico”.
Mencionó que la dispersión entre diez millones de familias permitió que se reactivará la economía popular.
En este contexto, destacó que las acciones emprendidas para enfrentar la inflación han permitido que se ubique por debajo de la media nacional con base en dos elementos, entre ellos el control de los precios de las gasolinas. Dijo que a pesar de las críticas conservadoras se continuará con la canalización de los excedentes petroleros para subsidiar el precio de la gasolina.
López Obrador aprovechó el tema para destacar las acciones para rehabilitar las refinerías que ha permitido apuntalar esta política energética en esta coyuntura. Recordó que se invirtieron 37 mil millones de pesos para la rehabilitación de las seis refinerías; Pemex está a punto de liquidar el último pago para adquirir la refinería texana de Deer Park.
Defendió su apuesta por apuntalar el sector petrolero frente a las voces que decían que ya no era rentable porque era inminente la transición energética y el surgimiento de automóviles eléctrica. Sin embargo, en esta coyuntura se ha evidenciado que no se debe hacer caso ya a los consejos de los tecnócratas.
En la conferencia, López Obrador mostró la evolución del precio de las gasolinas en una referencia comparativa con los dos sexenios anteriores. En el caso de la gasolina magna con Felipe Calderón se incrementó en 22.9 por ciento; con Enrique Peña Nieto, 42.9 por ciento y en esta administración, según los datos que mostro decreció 2.4 por ciento.
Por lo hace a la gasolina Premium, con Calderón aumentó 5.7 por ciento; con Peña Nieto, 46 por ciento y en este sexenio bajo 2.4 por ciento. En cuanto al diésel, se incrementó 49.9 por ciento; con Peña Nieto 48.6 por ciento y en su sexenio 3.9 por ciento.
“En México estamos haciendo lo que consideramos ayuda para enfrentar la inflación mundial. Lo principal es producir, no puede enfrentarse ningún problema económico, si no se tiene una actividad productiva fuerte”.
Aseveró que el fenómeno inflacionario se precipita por la guerra, “hay que tener presente que no se actuó bien porque se pudo haber evitado esa guerra falto política y diplomacia. Como no se midieron las consecuencias se desata la guerra que afecta a seres humanos, es lo peor que puede haber por la pérdida de vidas y también por los efectos en las economías en un mundo globalizado”.