Este miércoles se llevó a cabo la sesión de transición de la Secretaría de la Contraloría y Transparencia, en la cual se revisaron temas cruciales para la administración municipal entrante y se discutieron los retos pendientes dejados por la gestión del alcalde Miguel Treviño.
Durante la reunión, se destacó que entre 300 y 400 servidores públicos aún requieren capacitación en combate a la corrupción. Además, se identificaron varios desafíos, entre ellos la Contraloría Social de Obras Públicas, el programa de administración de riesgos del modelo de control interno, el programa Public Expenditure and Financial Accountability (PEFA), y la necesidad de espacios adecuados para comparecencias y audiencias en temas administrativos y disciplinarios.
Uno de los puntos clave abordados fue el incremento significativo del presupuesto de la Secretaría en materia de servicios generales, que aumentó de 4,989,750 pesos en 2023 a 16,558,583 pesos en 2024. Este aumento fue señalado por el equipo de transición del Ing. Mauricio Fernández, quien mostró su preocupación por la magnitud del incremento.
En cuanto a la obra pública, se cuestionaron los esfuerzos realizados por la contraloría para implementar medidas preventivas en lugar de reactivas. La administración actual reconoció que algunos esfuerzos están incompletos, pero aseguró que se cuenta con un Comité de Obra Pública para atender estos asuntos.
Otra preocupación destacada por el equipo de transición fue la convocatoria de la Contraloría Social. Se solicitó que esta convocatoria se aplace para permitir la participación de la nueva administración en el proceso, subrayando la importancia de un enfoque colaborativo y transparente.
Se mencionó también la existencia de una consultoría externa encargada de la entrega-recepción, un hecho sin precedentes en la historia del municipio, lo cual generó inquietud entre los miembros del equipo de transición.
Finalmente, el equipo del Ing. Mauricio Fernández solicitó respuestas a los oficios enviados desde el 1 de agosto, señalando que hasta la fecha no han recibido ninguna respuesta, lo que consideran un obstáculo para una transición fluida y efectiva.
La sesión concluyó con el compromiso de ambas partes de continuar trabajando para asegurar una transición ordenada y transparente, en beneficio de la administración entrante y de la ciudadanía.