Theresa May anunció cambios en su Gobierno, luego de que su mano derecha – el viceprimer ministro Damian Green- renunciara de manera forzada en los últimos días del 2017. Aunque se esperaba una remodelación completa, las modificaciones anunciadas por May fueron consideradas menores por los analistas.
El secretario de Estado de Inmigración, Brandon Lewis, sustituye a Patrick McLoughlin al frente del Partido Conservador, después de que éste perdiera la mayoría absoluta en las elecciones del pasado junio.
May busca afianzar su autoridad ante los cuestionamientos que la persiguen desde los comicios. Además, pretende diversificar su gabinete incluyendo a más mujeres, a políticos más jóvenes y a representantes de minorías étnicas.
Sin embargo, funcionarios que promovieron activamente el “Brexit” siguen en sus puestos a pesar de los pronósticos, como Boris Johnson y David Davis. En cambio, el ministro para Irlanda del Norte, James Broknshire, fue uno de los que dejó su puesto; lo reemplaza Karen Bradley, quien era secretaria de Estado de Cultura, Medios y Deporte.
La renuncia de Green fue obligatoria en diciembre pasado, cuando mintió acerca de unas imágenes pornográficas que fueron encontradas en su computadora. El cargo de viceprimer ministro aún no ha sido ocupado.
