El presidente de Rusia, Vladimir Putin, ha tenido un gesto con la Brigada 64 de Infantería Motorizada de las Fuerzas Armadas, acusada de la matanza de Bucha, una ciudad ucraniana situada a las afueras de Kiev, la capital.
El presidente ruso ha alabado el “heroísmo” y el “valor” de la 64 Brigada otorgándole el título honorífico de “Guardia”. El texto no alude en ningún momento a la “ofensiva militar en Ucrania”, como la califica Putin.
Cientos de civiles murieron en las calles de la localidad, maniatados, ejecutados y quemados… Putin hace alusión al heroísmo, coraje y valor demostrado por esos soldados rusos.
Las tropas rusas abandonaron Bucha el pasado 1 de abril y, desde entonces, se han recuperado más de 350 cadáveres, según autoridades locales. La mayoría de los cuerpos tenían heridas de bala y las imágenes de satélite demuestran que ya había cadáveres en las calles antes del repliegue.
Moscú niega su responsabilidad en lo que el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, y Joe Biden, califican como un “genocidio”. Vladimir Putin aseguró que la supuesta masacre de Bucha era “falsa”, en sus únicas declaraciones públicas sobre este tema.