El Grupo Parlamentario del PRI en la Cámara de Diputados manifiesta su rechazo a la violencia institucional que se ejerce en contra de las mujeres y niñas de este país, desde todos los órdenes y niveles de gobierno. Nuestra responsabilidad es proteger a las víctimas, no defender a los agresores.
En la conmemoración del Día Internacional de la Mujer y a un año de las poderosas manifestaciones y del paro de mujeres de marzo de 2020, hacemos un llamado a las autoridades a entender a los movimientos feministas como demandas legítimas al Estado mexicano, que es preciso decirlo, ha fracasado en su obligación de garantizar los derechos de las mexicanas.
Hemos cambiado las leyes, impulsado políticas y mejorado las instituciones, pero no se ha resuelto el problema, millones de mujeres y niñas siguen siendo víctimas de injusticias y discriminación por su condición de género al nacer.
Candidatos, líderes de partidos, diputados locales y federales, senadores, jueces, magistrados y ministros, titulares de los poderes ejecutivos municipales, estatales y federal, tenemos la responsabilidad moral y legal de evitar que agresores de mujeres sigan o lleguen al poder político. No se le puede fallar a las víctimas.