15 de octubre de 2024
En la sesión solemne del tercer informe de gobierno, Javier Caballero, diputado local del PRI, tomó la palabra en representación de su grupo parlamentario, en un evento marcado por la ausencia del gobernador Samuel García, quien optó por no asistir y enviar su mensaje por escrito.
Caballero planteó que, aunque podrían señalar los errores y áreas de oportunidad que enfrenta Nuevo León, es esencial ir más allá de la crítica y proponer soluciones. Resaltó el valor del espíritu republicano que consagra la rendición de cuentas y la división de poderes, enfatizando la importancia de cumplir con lo establecido en el artículo 79 de la Constitución.
Aprovechó la oportunidad para cuestionar la falta de presencia del Ejecutivo en este marco, preguntándose si el discurso sobre construir una nueva relación con el Poder Legislativo es solo una estrategia mediática. Enfatizó que, a pesar de esta ausencia, el PRI seguirá ofreciendo una postura crítica y constructiva con miras a alcanzar mejores resultados para el estado.
A medida que la administración estatal llega a la mitad del sexenio, Caballero urge a aprovechar el momento para corregir errores y tomar mejores decisiones. No obstante, advirtió sobre la creciente inseguridad en Nuevo León, que ha alcanzado cifras alarmantes con más de 1,400 asesinatos en lo que va del 2024, eclipsando los peores años del pasado. Asimismo, mostró preocupación por el aumento en la violencia de género, donde el estado se ha posicionado en primer lugar por feminicidios.
El legislador también abordó temas cruciales como la movilidad, señalando que la situación actual es insostenible, con ciudadanos haciendo largas filas para el transporte público, y cuestionó la efectividad de los nuevos proyectos de infraestructura. Además, habló sobre la crisis financiera que enfrenta el estado, resaltando la urgencia de presentar el paquete fiscal 2025 de forma oportuna.
Finalmente, el diputado hizo un llamado a trabajar en unidad para abordar la crisis del agua, la salud pública y restablecer el diálogo entre el Ejecutivo, el Poder Legislativo y la sociedad civil. Concluyó instando a todos los sectores a superar divisiones y colaborar por el bienestar de Nuevo León, asegurando que el PRI está dispuesto a contribuir con ideas y soluciones para enfrentar los desafíos que actualmente aquejan al estado.
