AFP
La acción del promotor Country Garden, uno de los mayores grupos inmobiliarios de China, perdió el lunes más de 15% en bolsa, generando preocupación en los mercados.
La acción del promotor Country Garden, uno de los mayores grupos inmobiliarios de China, perdió el lunes más de 15% en bolsa, generando preocupación en los mercados.
El índice Hang Seng de la bolsa de Hong Kong cerró en baja de 1.58%, el índice compuesto de Shanghái perdió 0.3% y en Tokio el Nikkei 225 cayó 1.27 por ciento.
La situación de Country Garden es una consecuencia directa de una crisis sin precedentes en el sector inmobiliario, un ámbito que, junto con el de la construcción, ha representado durante mucho tiempo un cuarto del PIB de China.
Country Garden es un grupo privado, presente principalmente en ciudades secundarias y que emplea a decenas de miles de trabajadores.
El grupo figura en la lista de Forbes de las 500 mayores empresas en el mundo y su presidenta, Yang Huiyan, era hasta hace poco la mujer más rica de Asia.
Country Garden, que presumía de solidez financiera, no pudo la semana pasada saldar dos rembolsos de intereses de préstamos.
El grupo dispone de un plazo de gracia de 30 días y podría caer en suspensión de pagos en septiembre si no logra pagar.
La empresa anunció de forma inesperada este fin de semana que suspendía las cotizaciones de una decena de obligaciones a partir de este lunes.
Esta decisión generó inquietud en los mercados.
El grupo estimaba su deuda a alrededor de 1.15 billones de yuanes (unos 159,000 millones de dólares) a finales de 2022. Para la agencia Bloomberg la cifra es de unos 1.4 billones de yuanes (193,000 millones de dólares).
Ante este contexto tan desfavorable, la acción de Country Garden cedió el lunes a media jornada 16.3% en la Bolsa de Hong Kong.
La jefa de Country Garden admitió el viernes que su empresa encaraba, debido a la coyuntura, “las peores dificultades” desde su creación.
Igual que Evergrande, su rival y también con una deuda multimillonaria, si Country Garden se hunde, las repercusiones en el sistema financiero y económico de China serían catastróficas.