AFP
25 de septiembre de 2024
Sean “Diddy” Combs, el rapero estadounidense, se enfrenta a una nueva demanda, luego de haber sido detenido bajo los cargos de tráfico sexual, debido a que una mujer lo denunció por supuestamente haberla drogado y violado en 2001.
Thalía Graves, quien autorizó la difusión de su nombre, realizó una conferencia de prensa en Los Ángeles, en donde habló sobre su caso, el cual se suma a una serie de denuncias contra “Diddy”, las cuales salieron a la luz en 2023.
El documento legal consignado ante un tribunal de Nueva York este martes, indica que la demandante tenía 25 años cuando fue llevada al estudio de Sean Combs en Nueva York, Bad Boy Records, para una reunión, y perdió la consciencia tras recibir un trago de manos del rapero y de su guardaespaldas.
“Ella se despertó y se encontró atada y sujeta”, dice la querella. Combs y Joseph Sherman, su entonces guardaespaldas, “procedieron a abusarla brutalmente y a violarla. El rapero la violó sin piedad, analmente y vaginalmente”, señala el documento.
Thalía afirma que guardó silencio, debido a que estuvo bajo amenazas durante más de dos décadas, y explicó que en 2023 descubrió que sus agresores habían grabado la violación “y la habían mostrado a varios hombres”.
“El dolor interno tras ser sexualmente atacada es increíblemente profundo y difícil de poner en palabras”, dijo Graves este martes en la rueda de prensa en la que también estuvo presente su abogada Gloria Allred.
Allred, quien se ha hecho un nombre defendiendo a mujeres víctimas de abusos, dijo que con la demanda buscan destruir e impedir la difusión del supuesto video, además de una compensación económica por los daños físicos y emocionales causados por el ataque.
Sean Combs, de 54 años, espera en una prisión de Nueva York mientras inicia su juicio por cargos de tráfico sexual, asociación ilícita y promover la prostitución, luego de que fue detenido el pasado 16 de septiembre.
Los fiscales alegan que abusó de mujeres y las obligó a participar en fiestas sexuales con drogas mediante amenazas y violencia.
La semana pasada, un juez negó las peticiones de los abogados de Sean Combs, que tenían por objetivo que el rapero tuviera la posibilidad de esperar por el juicio en libertad bajo fianza.
Junto con los cargos de tráfico sexual y de asociación ilícita, Combs es inculpado de transportar a víctimas entre estados de Estados Unidos con el fin de prostituirlas.
Los fiscales lo señalan de ser el jefe de una empresa criminal que obligaba a esas mujeres a tener relaciones sexuales bajo amenaza de violencia, inseguridad económica o arruinar su reputación.
También conocido como Puff Daddy o P Diddy, Combs se había convertido en una poderosa figura del hip-hop, produciendo a estrellas como el fallecido The Notorious B.I.G e incluso fue cercano a Justin Bieber.
