Ap
06 de octubre de 2024
Israel amplió ayer sus bombardeos contra Líbano y alcanzó los suburbios del sur de Beirut con 12 ataques aéreos, además de golpear por primera vez un campo de refugiados palestinos en el norte del país, en un ataque contra combatientes de Hezbollah y Hamas además de continuar su ofensiva en el centro y norte de la franja de Gaza.
Anoche, al cierre de esta edición, el ejército israelí desencadenó una ofensiva múltiple contra los suburbios del sur de Beirut, provocando “explosiones masivas, con llamas que alcanzaban el cielo y el sonido reverberando alrededor de la capital libanesa, mientras en Gaza bombardearon la mezquita Shahada al Aqsa en Deir al Balah, con saldo de al menos a 21 palestinos muertos y docenas de heridos porque, de acuerdo con el ejército, Hamas utilizaba el inmueble como complejo de mando y control, informó Al Jazeera.
Más temprano, decenas de miles de personas en Líbano, incluidos refugiados palestinos, seguían huyendo del conflicto en la región.
El embate contra el campo de refugiados de Beddawi, cerca de la ciudad norteña de Trípoli, mató a un dirigente del ala militar de Hamas, a su esposa y a sus hijas pequeñas, explicó el grupo insurgente en un comunicado. Hamas informó después que otro miembro de su ala militar murió en un ataque israelí en el valle de Bekaa, en el este de Líbano. Columnas de humo dominaban el horizonte de los poblados conurbados del sur de Beirut, donde Hezbollah tiene una fuerte presencia.
El ejército israelí acusó que se habían disparado unos 90 proyectiles desde Líbano hacia su territorio. La mayoría de ellos fueron interceptados, pero algunos cayeron en la ciudad árabe de Deir al Asad, en el norte del país, donde tres personas sufrieron heridas leves. Al menos seis civiles fallecieron en más de una docena de ataques israelíes en la noche y la madrugada de ayer, según la Agencia Nacional de Noticias, la agencia noticiosa estatal libanesa.
Periodistas de Ap documentaron el paso a pie de miles de desplazados por el Cruce Fronterizo de Masnaa, entre Siria y Líbano, aún cuando los ataques aéreos israelíes del jueves dejaron enormes cráteres en la carretera que conducía hacia el lugar.
El servicio libanés de gestión de catástrofes señaló que más de 2 mil personas han muerto en Líbano desde octubre de 2023, de las cuales más de mil fallecieron desde el 23 de septiembre.
El gobierno libanés cifró en alrededor de 1.2 millones los desplazados, entre ellos unos 374 mil que huyeron en los días recientes hacia Siria, de acuerdo con las autoridades locales.
Las fuerzas de defensa de Israel manifestaron que sus comandos especiales llevaban a cabo ataques terrestres selectivos contra infraestructura de Hezbollah en el sur de Líbano y que, además, desmantelaron pozos de túneles empleados por el grupo armado para acercarse a la frontera israelí.
Por su parte, Hezbollah aseguró que lanzó cohetes contra la base aérea israelí de Ramat David cerca de la ciudad de Haifa, en el norte de Israel, situada a unos 45 kilómetros de la frontera con Líbano.