Durante la declaratoria de una reforma constitucional en el Senado, Alejandro “Alito” Moreno subió a la mesa directiva para confrontarse directamente con el presidente de la Mesa, el petista Gerardo Fernández Noroña. La sesión, marcada por un intenso debate, se centraba en la reforma impulsada por Morena para limitar las revisiones del Poder Judicial sobre enmiendas constitucionales.
Al inicio, legisladores de la oposición solicitaron el uso de la palabra, pero Fernández Noroña respondió que la discusión formal debía comenzar con el trámite de la reforma. Tras completar este proceso, Noroña accedió a abrir los micrófonos, lo que avivó el debate entre los distintos grupos parlamentarios.
El ambiente se tornó tenso cuando Fernández Noroña, con el respaldo de la mayoría morenista, intentó cerrar la sesión bajo el argumento de que el tema ya había sido suficientemente discutido. Ante esto, “Alito” Moreno mostró su inconformidad y subió a la tribuna para expresarse, desencadenando un altercado que incluyó señalamientos y gestos de descontento. Moreno tocó el hombro de Noroña, quien respondió firmemente pidiendo que no lo tocara.
La situación escaló rápidamente cuando legisladores de Morena subieron al estrado para apoyar a Noroña, y se observó a la senadora Lucía Trasviña abriéndose paso entre los presentes. Finalmente, el incidente fue controlado, aunque dejó claro el clima de tensión que rodea las reformas en el Senado.